Este
año celebramos una de las efemérides más importantes del mundo literario, el
400 aniversario de la muerte de Miguel de Cervantes Saavedra. Como pequeño
homenaje a tal ilustre alcalino, la siguiente entrada trata sobre uno de los
pasajes que aparecen en el capítulo 32 de la segunda parte del ingenioso
caballero Don Quijote de la Mancha.
John Vanderbank Las criadas lavan las barbas de Don Quijote |
"Finalmente,
don Quijote se sosegó, y la comida se acabó, y en levantando los manteles
llegaron cuatro doncellas, la una con una fuente de plata y la otra con un
aguamanil asimismo de plata, y la otra con dos blanquísimas y riquísimas
toallas al hombro, y la cuarta descubiertos los brazos hasta la mitad, y en sus
blancas manos —que sin duda eran blancas— una redonda pella de jabón napolitano.
Llegó la de la fuente, y con gentil donaire y desenvoltura encajó la fuente
debajo de la barba de don Quijote; el cual, sin hablar palabra, admirado de
semejante ceremonia, creyendo que debía ser usanza de aquella tierra en lugar
de las manos lavar las barbas, y, así, tendió la suya todo cuanto pudo, y al
mismo punto comenzó a llover el aguamanil, y la doncella del jabón le manoseó
las barbas con mucha priesa, levantando copos de nieve, que no eran menos
blancas las jabonaduras, no solo por las barbas, mas por todo el rostro y por los
ojos del obediente caballero, tanto, que se los hicieron cerrar por fuerza. El
duque y la duquesa, que de nada desto eran sabidores, estaban esperando en qué
había de parar tan extraordinario lavatorio. La doncella barbera, cuando le
tuvo con un palmo de jabonadura, fingió que se le había acabado el agua y mandó
a la del aguamanil fuese por ella, que el señor don Quijote esperaría. Hízolo
así, y quedó don Quijote con la más estraña figura y más para hacer reír que se
pudiera imaginar"
Enrique Herreros. Fuente: http://porlacalledealcala.blogspot.com.es/ |
Aquí
vemos cómo las doncellas se burlan de don Quijote tanto en hacerle creer que el
lavado de la barba es una costumbre en ese lugar, cómo el hecho de aparentar
que se quedaban sin agua para dejar al caballero con la cara totalmente
enjabonada durante un tiempo y, así, alargar la broma.
Llama
la atención éste acontecimiento por ser una de las tres veces que don Quijote
se lava en toda la obra. Y, no es que don Quijote fuese desaseado por
iniciativa propia, sino que en la España del siglo de Oro, los propios médicos guiados
por el «hipocratismo galenizado» junto con ideas mágicas-religiosas, desaconsejaban
los baños al pensar que el cuerpo se reblandecería permitiendo la entrada de
enfermedades por los poros del propio cuerpo.
Lo que hacían en aquella época era limpiarse en seco frotándose la piel con telas para después rociarla con algún perfume que tapara el olor. Como hasta el siglo XVIII no se lavaban la cara con agua (pensaban que podría provocar dolores dentales y resfriados), don Quijote quedó muy sorprendido, no sólo del lavado de la cara tras la comida, sino del uso del jabón.
Lo que hacían en aquella época era limpiarse en seco frotándose la piel con telas para después rociarla con algún perfume que tapara el olor. Como hasta el siglo XVIII no se lavaban la cara con agua (pensaban que podría provocar dolores dentales y resfriados), don Quijote quedó muy sorprendido, no sólo del lavado de la cara tras la comida, sino del uso del jabón.
Una anciana espulga a un niño. Esteban Murillo. Fuente: www.nationalgeographic.com.es |
Y éste era un jabón especial, jabón napolitano. Según los expertos el jabón napolitano era usado sobre todo para suavizar las manos. En su composición entraba jabón de Valencia o de Chipre, almidón o salvado de trigo muy blanco, agua de cisterna, perfume y otros ingredientes.
Receta para la fabricación del jabón Castilla. Fuente: http://www.redes-cepalcala.org/ |
Seguramente, éste jabón napolitano era similar al jabón blanco que se producía en las Reales Almonas de Triana, Sevilla, en el siglo XVII. Probablemente, el jabón que se consumía en La Mancha en aquella época tenía su origen en Sevilla. Para este jabón de baja calidad se utilizaban cenizas ricas en potasa.
Pero,
¿qué es el jabón? ¿y cómo se fabrica?
El
jabón generalmente son sales sódicas o potásicas resultadas de la reacción
química entre un álcali (generalmente hidróxido de
sodio o de potasio) y algún ácido graso; esta reacción se
denomina saponificación. Esta reacción permite la transformación milagrosa
del aceite o grasa en jabón. Para ello, se lleva a cabo una hidrólisis alcalina
del éster en una reacción química que además de producir jabón produce
glicerina un tipo de alcohol llamado glicerina, el cual también aparece, entre
otras reacciones, como producto en la degradación digestiva de los lípidos.
La obtención de jabón es un proceso químico relativamente sencillo y uno de los más antiguos. Ya las tribus germanas en épocas de César hervían sebo de cabra con potasa que obtenían por lixiviación de las cenizas del fuego de leña.
http://iespoetaclaudio.centros.educa.jcyl.es/ |
La obtención de jabón es un proceso químico relativamente sencillo y uno de los más antiguos. Ya las tribus germanas en épocas de César hervían sebo de cabra con potasa que obtenían por lixiviación de las cenizas del fuego de leña.
¿Para
qué es importante el jabón?
A
diferencia de lo que pensaban los médicos del siglo de Oro, el jabón constituye
hoy en día la estrategia más rápida, eficaz y económica para prevenir
enfermedades, sobre todo, en el mundo hospitalario. Desde las observaciones de Ignaz
Semmelweis, pasando por los trabajos de Louis Pasteur y Robert Koch, se afianzó
la idea que el uso del jabón, así como la esterilización del material usado en
las intervenciones, contribuía a salvar vidas. Sólo un dato, diariamente mueren
5 mil niños a causa de la diarrea, llamada “enfermedad de las manos sucias”,
mayoritariamente en África y Asia. La mitad de estas muertes se podrían evitar
si los niños se lavaran las manos con jabón antes de comer y después de ir al
baño.
Es tal la importancia de este gesto, que la OMS ha establecido el día 15 de octubre como Día Mundial del Lavado de Manos.
¿Por qué de su poder higiénico y limpiador?
Médicos cirujanos lavándose las manos. Fuente: http://www.itesel.es/ |
Es tal la importancia de este gesto, que la OMS ha establecido el día 15 de octubre como Día Mundial del Lavado de Manos.
¿Por qué de su poder higiénico y limpiador?
Las
moléculas de jabón son anfipáticas, es decir, presentan una parte hidrofílica o
soluble en agua, y otra hidrófoba o liposoluble, es decir que rechaza el agua.
Cuando nos lavamos las manos o, en el caso de don Quijote la cara con barba
incluida, la parte hidrófoba se adhiere a las partículas de suciedad, mientras
que la parte hidrofílica a las moléculas de agua. De esta, el jabón con la
propia fricción, que facilita el desprendimiento de la suciedad, hace que la
suciedad se “disuelva”. Al eliminar la suciedad, también erradicamos los microorganismos
que allí pudiesen habitar.
La
forma en la que “viaja” el jabón con la suciedad es en forma de micelas, estructura
globular donde la periferia está formada por las moléculas de jabón y el
interior por la suciedad. Si bien, a veces puede ser aire lo que encierre y
entonces tenemos la espuma que vemos al lavarnos las manos. En esta micela, por
lo que dije antes, la parte hidrófoba mira hacia dentro, evitando el contacto
con el agua, mientras que la hidrofílica está orientada hacia el exterior,
solubilizando y permitiendo la eliminación de la suciedad.
¿Por qué el jabón napolitano levantaba copos de nieve?
¿Por qué el jabón napolitano levantaba copos de nieve?
La
espuma que hace un jabón y no otro se debe al tipo de aceite o grasa que se usó
en su fabricación. Otros ingredientes que se usan hoy en día como azúcar de la
leche o sal también pueden influir en la formación de la espuma.
Así, la manteca de cerdo y el sebo crean una espuma estable, pero no formarán espuma como los aceites de aguacate, de coco y de ricino. Lo ideal sería que cualquier jabón que se utilice para el cuidado personal de la piel enjabone de dos maneras. En una, el jabón producirá una espuma voluminosa y mullida, y en segundo lugar, la espuma será lo suficientemente estable como para eliminar suciedad también. La mayoría de los jabones utilizan una combinación de aceites que producen ambas espumas, suaves y estables, o aceite de ricino, que produce ambos tipos de espuma. El tipo de aceite usado no sólo influye en el tipo de espuma que se produce, sino también si el producto final; el jabón será duro o blando. El coco, de palma, la manteca de cerdo y el sebo producirán un jabón duro, mientras que el aceite de oliva, aceite de almendra y el aceite de jojoba producirán jabones blandos. Los jabones que contienen aceite de coco o manteca de karité no sólo producen barras de jabón duras, sino que también hidratan y espuman bien, haciéndolos ingredientes de alta calidad para jabones.
¿Cómo influye el agua que recogieron las doncellas barberas?
Así, la manteca de cerdo y el sebo crean una espuma estable, pero no formarán espuma como los aceites de aguacate, de coco y de ricino. Lo ideal sería que cualquier jabón que se utilice para el cuidado personal de la piel enjabone de dos maneras. En una, el jabón producirá una espuma voluminosa y mullida, y en segundo lugar, la espuma será lo suficientemente estable como para eliminar suciedad también. La mayoría de los jabones utilizan una combinación de aceites que producen ambas espumas, suaves y estables, o aceite de ricino, que produce ambos tipos de espuma. El tipo de aceite usado no sólo influye en el tipo de espuma que se produce, sino también si el producto final; el jabón será duro o blando. El coco, de palma, la manteca de cerdo y el sebo producirán un jabón duro, mientras que el aceite de oliva, aceite de almendra y el aceite de jojoba producirán jabones blandos. Los jabones que contienen aceite de coco o manteca de karité no sólo producen barras de jabón duras, sino que también hidratan y espuman bien, haciéndolos ingredientes de alta calidad para jabones.
¿Cómo influye el agua que recogieron las doncellas barberas?
El
jabón hará menos o quizá no haga espuma en absoluto en el agua dura, que es
agua que contiene minerales disueltos tales como calcio y magnesio. Los aceites
del jabón, que son ácidos, reaccionan con el calcio y magnesio en el agua, y
esto afecta negativamente a la calidad de formación de espuma del jabón. El
agua blanda no contiene una cantidad medible de minerales y producirá una
espuma mejor. Por lo que, el agua que traen es agua blanda. El agua blanda se
caracteriza por tener una concentración de cloruro de sodio ínfima y una baja
cantidad de iones de calcio y magnesio.
Don Quijote en casa de los Duques. Antonio Gisbert. Fuente: |
¿Dónde
se fabricó el jabón que usó don Quijote?
Es
probable que en las Reales Almonas de la calle Castilla del barrio de Triana en
Sevilla. Una almona es una jabonería, una fábrica de jabón o una tienda donde
se vende jabón. Por otro lado, la denominación de Reales Almonas se debe a que
pertenecían a la corona con monopolio del Estado, si bien la explotación le fue
concedida a la familia de nobles de los Enríquez de Ribera.
Los
ingredientes que se usaban era la grasa sobrante del aceite de oliva llegado
del Aljarafe, mazacote, orujo, cal, cenizas (procedentes de la quema de la
hierba denominada barrilla), caparro y agallas. El perfume se conseguía con
otros productos como el almizcle, el ámbar, la menta o la algalia. El jabón se
comercializaba con la marca Jabón de Castilla.
Restos de las Reales Almonas de Triana. Fuente: culturadesevilla.blogspot.com.es |
Estuvieron
funcionando desde principios del siglo XVI hasta el siglo XX, pero finalmente
fue prácticamente destruido, salvo algunos restos que pueden verse hoy en el
Paseo de la O y junto a la Parroquia de la O.
No
sabemos si don Quijote sabía de la procedencia del jabón o de sus ingredientes.
Del por qué hacía tanta espuma o de sus repercusiones en la salud y vida de las
generaciones futuras, pero si vemos que en esa velada demostró más cordura que
sus anfitriones. Pues eso es don Quijote, un eterno equilibrio entre locura y
cordura, pero lo que uno nunca sabe es qué tocará y a quién. El elegir una u
otra quizás dependa de cuál sea la más idónea para salir de la adversidad.
Fuentes:
Sánchez
Ron JM. La ciencia y el Quijote. Crítica, Barcelona, 2005.
Vigarello
G. Lo limpio y lo sucio. La higiene del cuerpo desde la Edad Media. Alianza,
Madrid, 1991.
http://www.nationalgeographic.com.es/articulo/historia/secciones/9353/don_quijote_hidalgo_que_casi_nunca_lavaba.html
http://www.pagina-1.es/index.php/secciones/historia/120-historias-de-la-higiene
http://www.nationalgeographic.com.es/articulo/historia/secciones/9353/don_quijote_hidalgo_que_casi_nunca_lavaba.html
http://www.pagina-1.es/index.php/secciones/historia/120-historias-de-la-higiene
"Esta entrada participa en el LV Carnaval de Química alojado en el blog La Ciencia de la vida de@biogeocarlos."