La tradición japonesa dice que se le concederá un deseo a aquél que consiga doblar 1000 grullas de papel como recompensa por el esfuerzo y la concentración que hacen falta para lograrlo. Este deseo será una vida larga o la recuperación de una enfermedad. Para los japoneses la grulla significa además paz. Así, el don de las mil grullas es un poderoso gesto de amor, cariño y esperanza.
Fuente: www.taringa.net |
De
dos años de edad, Sadako Sasaki estaba a un kilómetro y medio de la explosión,
y milagrosamente escapó sin lesiones visibles. Nueve años más tarde,
Sadako empezó a mostrar síntomas de una enfermedad. Meses más tarde, fue
diagnosticado con leucemia, consecuencia de la radiación de la bomba
atómica.
Fuente: www.fundacionsadako.org |
Un
día de agosto mientras recibía la visita de su mejor amiga, Chizuko Hamamoto,
esta le preguntó a Sasaki: ¿Recuerdas aquella historia que dice que si logras
hacer 1000 grullas de papel con el arte del origami, los dioses te concederán
un deseo que se hará realidad?” Entonces Hamamoto plegó una pieza de papel
dorado una y otra vez formando una hermosa ave. Se la entregó a Sadako y le
dijo: “Aquí está tu primera grulla”
Doblar grullas en origami no es tarea fácil, pero en los días siguientes, después de que su amiga le enseñó
la forma correcta de plegar el papel, empezó a hacer tantas como podía. Sadako tenía la edad en la que el ser humano aún conserva la creencia en el poder invisible de los milagros, así que comenzó a elaborar sus propias grullas. Como
eran una gran cantidad de pajaritos los que tenía que hacer y no había
suficiente material debido a que todo el país se encontraba en recesión, tuvo
que ingeniárselas para encontrar otras fuentes de papel, y de esa forma empezó
a utilizar todo lo que tenía a su alcance en el hospital: cajas de pastillas,
etiquetas, recetas, envolturas de golosinas, cartas, sobres etc… Sadako tenía
la esperanza de que los dioses le concedieran el deseo de volver a correr de
nuevo. Sin embargo, pensó que no sería justo pedir la curación sólo para ella, cientos
de enfermos empezaron a poblar sus camas de hospital (no
olvidemos que las víctimas de radiación y mutaciones, se manifestaron entre los
8 y 9 años posteriores al bombardeo). Así que pidió que el esfuerzo que iba a hacer sirviera también para traer la paz y la
curación a todas las víctimas del mundo. Pasó el tiempo y el número de grullas
iba aumentando, pero el estado de Sadako empeoraba, su piel empezó a
amoratarse, perdió el apetito y físicamente se debilitaba cada vez más. Ya
había pasado ocho meses en el hospital y su familia la visitaba asiduamente al
igual que sus compañeros de clase. El 25 de octubre Sadako hizo un enorme
esfuerzo para comer y apenas probó el arroz. Su madre le preguntó tras un par
de bocados si el arroz estaba bueno y Sadako respondió: “está rico mami”. Esas
fueron sus últimas palabras, pues la niña murió el 25 de octubre de 1955 poco después de que su familia
dejase el hospital tras la visita. Sadako había conseguido hacer solo 644 grullas de papel.
Tras su muerte, sus compañeros del colegio impactados por la
pérdida hicieron pública la historia de Sadako para honrar su memoria. Esta
tuvo un impacto social muy fuerte, miles de niños en todo Japón sintieron la
necesidad de completar la labor de Sadako, y el día del sepelio fue enterrada
con sus 644 Grullas de papel, pero más de diez mil grullas de colores de miles
de niños de todo el país adornaron su lápida.
Fuente: http://fondationscp.wikidot.com/ |
Monumento a Sadako en Hiroshima |
Una
campaña comenzó a construir un monumento para todos los niños que perdieron su
vida como resultado de la bomba atómica, y tres años más tarde el Monumento a
la Paz de los Niños se abrió en el centro del Hiroshima Peace Park. Una hermosa cúpula dedicada a todos los niños que murieron a causa del ataque
nuclear. En la cima puede reconocerse a una chiquilla que con los brazos
abiertos sostiene a una espléndida ave dorada con una breve, pero contundente
inscripción:
«Este es nuestro grito, esta es nuestra plegaria:paz en el mundo».
3ºA POR UN MUNDO EN PAZ
Sadako
Sasaki se ha convertido en un símbolo de la paz que transciende el tiempo y las
nacionalidades. Su corta vida expone la infelicidad y crueldad que
soportan los niños por las guerras. El Monumento a la Paz de los Niños recibe
unos 10 millones de grullas de papel cada año en todo el mundo. De
personas que sueñan con un mundo en paz, como mis alumnos de 3ºA, que inspirados en Sadako, en su gesto de valentía, inocencia, voluntad y en cómo se aferró a la esperanza de vivir hasta el final, han comenzado a crear las mil grullas. Porque si una enfermedad no pudo apagar en ella la voluntad y la plegaria por todas las víctimas del mundo, nuestra clase de 3ªA tampoco.
Con nuestro gesto queremos honrar su memoria y recordar que todavía las guerras afectan a los niños olvidando sus derechos. Durante
el transcurso de los últimos diez años, se estima que más de un millón de niños
han fallecido en conflictos armados.
Para poder conseguirlo, nuestro alumno José Luis Castell, aprendió por sí mismo
la técnica de origami de cómo hacer una grulla de papel. A continuación, nos enseñó a
todos en una tutoría. Desde entonces, en los ratos libres del colegio, en casa, y en la
hora de tutoría de los viernes, todos nos ponemos a hacer grullas mientras
hablamos de cómo nos ha ido la semana.
Nos pusimos en contacto con la Fundación
Sadako (http://www.fundacionsadako.org/) y desde ahí su Presidenta Tomoko
Aikawa, Embajadora de Paz de Hiroshima, nos indicó los pasos que deberemos
seguir para mandar las 1000 grullas a Japón. Desde aquí aprovechar la ocasión
para agradecer a Tomoko Aikawa sus palabras y su ayuda.
José Luis Castell |
En estos momentos que escribo estas líneas tendremos unas 300 y esperamos llegar
a las 1000 antes de acabar el curso puesto que nos gustaría que llegasen para
el 6 de agosto, día de la Paz en Japón, a Hiroshima. Si no fuese así, la otra fecha que barajamos como límite es el 25 de octubre, ya que ése día de 1955, Sadako nos dejó.
¡Ánimo chic@s!
"Este es nuestro grito. Esta es nuestra oración. Paz en el mundo."